viernes, 25 de agosto de 2017

Vicus Aeleni o Vicus Caeleni?

Aproximación y recreación de la toponimia antigua de la ciudad de Vigo 
 
 
VICUS CAELENI CAPITAL DE LOS CELENOS

Existe un interés creciente por conocer el nombre latino de la actual ciudad de Vigo. Las teorías más tradicionales o antiguas hacían derivar a Vigo del Vicus Spacorum del Itinerario Antonino. Hoy en día sabemos que ese Vicus Spacorum es una deformación de Vicus Caporum, el vicus de la tribu de los Caporos, una tribu que se extendía entre Santiago de Compostela y Lugo, concretamente Vicus Caporum se corresponde con la aldea de Vigo en Rois.
Está claro que Vigo deriva de un vicus pero cuál es el apelativo que acompañaba a ese vicus. Las fuentes clásicas como Plinio o Estrabón hablan de la tribu de los Hellenos que preceden a la tribu de los Grovios, éstos últimos se corresponden con la Serra da Groba. También sitúa a los Hellenos como inmediantamente después de los Cilenos o Celenos, una tribu del convento lucense situada en torno a la actual Caldas de Reis. Los Celenos sería una tribu comprendida entre Caldas de Reis (Aquis Celenis) y Tui (Tude). Los Hellenos eran la tribu que habitaba concretamente el área de la ciudad de Vigo. Para Fermín Pérez Losada el apelativo de Vigo sería, por tanto, Vicus Helleni, Eleni, Elanei, Aeleni, y el castro de Vigo sería Elaneobriga. Pero añade Pérez Losada, y aquí viene lo interesante del asunto, que Eleni, Helleni, Elanei, Aeleni seguramente sea una deformación de un nombre indígena, una reproducción corrupta de un nombre indígena que se "helenizó" por similitud sonora en vicus "helleni", el Vigo de los Helenos. Yo defiendo que el Vicus Aeleni que defiende Fermín Pérez Losada es una deformación, una transcripción fonética errónea de un Vicus Caeleni, y el castro de Vigo se llamaría entonces Caelobriga, el castro del cielo.
Caelo, caelum es el nombre latino de cielo y no nos debe llamar la atención, pues la ciudad de Vigo y el castro de Vigo posee uno de los firmamentos u horizontes más impresionantes de Galicia. El skyline de las islas Cíes y sus puestas de sol son espectaculares. Resulta curioso que el castro de Vigo se sitúe precisamente hacia poniente sobre una atalaya para contemplar las inigualables puestas de sol de la ciudad de Vigo. También para los romanos Vigo era la ciudad celeste. Si el castro de Vigo se llamaba Caelobriga, el nombre "romance" resultante sería algo así como El Calabre, y curiosamente el extremo más occidental del Calabre sería la Punta del Calabre que derivó en Punta de Alcabre. El topónimo de Alcabre sería el único remanente existente en la actualidad de ese Calabre primitivo derivado de Caelobriga, el castro desde donde observar el cielo. Desde los altos de Cabral, donde nace el Lagares, hasta la Punta de Alcabre se extendían los dominios y el valle del castro de Caelobriga (Vigo), Calabre o Cabre en lengua romance.
Vigo sería la capital de la tribu de los Celenos o Caelenos, que se extendería desde el sur de la ría de Vigo hasta Aquis Celenis (Caldas de Reis) en la frontera entre las provincias de Pontevedra y A Coruña, donde se encontraban los baños o termas de los Celenos, de ahí el nombre de Aquis Celenis, pero todo ello formando parte de la misma tribu o etnia.
Vicus Celenis (Vigo), como capital de los Celenos, fue un importante puerto marítimo y comercial en época Antigua, el más importante del área del sur de Galicia, a donde llegaban barcos procedentes del Mediterráneo. En época romana Vigo era un enclave destacado en el oeste de la península. De esta manera se viene abajo el mito de que Vigo es una ciudad sin historia. Vigo es una ciudad que tiene una historia pareja a otras ciudades de Galicia como pueden ser Lugo, Santiago, A Coruña, Pontevedra o Ourense. Vigo, contra todo pronóstico, es la ciudad más antigua de Galicia, la capital prerromana de las regiones Eoas de la ecúmene de los griegos.
Otro topónimo curioso relacionado con el cielo es el de las islas Cíes. Su nombre deriva de la raíz indoeuropea Kwye- con el significado de "quietas, tranquilas, fijas", y no es de extrañar, porque observando las espectaculares puestas de sol de las islas Cíes uno puede ver como el sol se desplaza en el firmamento a lo largo del año mientras las Cíes son las únicas que se mantienen quietas y fijas en su lugar. En el solsticio de invierno el sol se pone por la bocana sur de la ría y en el solsticio de verano el sol se pone por la bocana norte de la ría de Vigo. En el equinoccio, en cambio, se sitúa sorprendentemente entre las dos islas. Uno puede observar el desplazamiento del sol a lo largo del año mientras las islas Cíes son las únicas que se mantienen fijas en su lugar, algo realmente llamativo. Las islas Cíes serían algo así como las islas Quiescentes. 
Es, por tanto, el castro de Vigo la atalaya desde donde observar el firmamento, el desplazamiento del sol y de los astros en toda su magnitud con la referencia de las Cíes siempre quietas, un rasgo inexplicable que llamaba la atención de los antiguos vigueses. 
Desde Caelobriga, la ciudad celeste, los antiguos vigueses observaban el cielo, como hacen hoy en día.
En el Museo Quiñones de León existen tres estelas funerarias de personas que residieron en Vigo en época romana procedentes de Clunia Sulpicia en Peñalba de Castro (Burgos). Es de esperar que exista reciprocidad de vigueses en Clunia. Y efectivamente en Peñalba de Castro se halló un epígrafe de un tal Soncano Caelenio. 
También es sabido que el primer xalleiro del que se tiene constancia en la historia escrita, a través de  una inscripción o epitafio sepulcral encontrado en el municipio de Santa Comba, es un "vigués" llamado Caeleo Cadroiolonis de la tribu o castelo de los Cilenos junto a su hijo Caesarus Caeleonis, o podemos darle la vuelta y decir que el primer vigués del que se tiene constancia de forma escrita fue un xalleiro o santacombés, ya que el susodicho fue enterrado precisamente en el municipio de Santa Comba.  
 
 


                                                            Equinoccio en las islas Cíes




© Marcos Castro Vilas, arquitecto





sábado, 5 de agosto de 2017

Os celtas viñeron de África





Se entendemos por celtas aos habitantes das partes máis occidentais de Europa, entón, o fundamental do substrato celta procede do norte de África e non do norte de Europa.

Para Estrabón os galos constrúen as súas casas de maneira circular con unha espesa capa de palla nas cubertas. No mesmo texto faise eco das palabras de Éforo. Para Éforo a Céltica engloba a maior parte da Iberia ata Cádiz.

Segundo o narrador latino Rufo Festo Avieno, os celtas ocupaban as marxes atlánticas europeas dende as columnas de Hércules cara o norte. Para os romanos, os celtas eran os habitantes máis aló dos Alpes, os chamados galos, diferenciándoos claramente do mundo mediterráneo. Na actualidade enténdense por celtas as culturas centroeuropeas de Hallstatt e de La Tène, e aínda que hai unha forte compoñente centroeuropea na cultura celta, sobre todo a nivel lingüístico, os celtas eran os africanos do continente europeo.

Por volta do ano 6.000 a.C a desecación do Sáhara provocou unha forte migración cara ó norte de Europa de persoas procedentes do norte de África, especialmente ao longo da costa, dende Portugal ata Escocia. Estas xentes norteafricanas eran portadoras de xenes, casas, vacas e unha novidosa cultura.
 
Por exemplo, eran portadoras do haplogrupo M81 de orixe norteafricana e que alcanza as máximas frecuencias na metade occidental da península ibérica, sobre todo, en Portugal, Galicia, Extremadura ou León. Tamén está moi presente nos pasiegos cántabros (40%), e non ten nada que ver con repoboacións posteriores de moriscos trala Reconquista.
Este aporte xenético norteafricano chegou ata Irlanda, Gales e Inglaterra. Son os chamados “black irish phenotype”, individuos de cabelos escuros, negro azulado, como poden ser o cantante Brian Kennedy, o actor Pierce Brosnan, as actrices Catherine Zeta-Jones e Courteney Cox, o actor Peter Gallagher, a cantante Dolores O'Riordan, Andrea Corrs ou o político americano de orixe irlandesa Paul Ryan.
Se tivésemos que definir un modelo racial galaico sería un individuo rubio, de ollos claros e xenes norteafricanos, froito do choque de Europa e África en terras galegas. A partir de aquí tódalas variantes posibles, dende individuos moi mouros de cabelos negros e azulados ata individuos rubios de clara influencia do norte de Europa.
 
As vivendas dos celtas occidentais eran redondas, de manifesta influencia africana, frente as vivendas dos celtas de Centroeuropa, que eran de forma rectangular, propias da cultura Hallstatt e La Tène.
A raíz KEL é unha raíz moi antiga que significa xirar, tornar ou redondo (palabras como colar ou colo teñen esta orixe). De aí vén a palabra Keltoi, aqueles que habitaban o ocaso, o occidente de Europa e construían as súas casas de maneira circular, frente as formas rectangulares dos celtas da Centroeuropa.

Estes pobos do norte de África tamén trouxeron a agricultura e a gandería. Con eles comezarían as prácticas neolíticas. E con eles chegaron as vacas.
Ao igual que ocorre coas persoas, dentro do mundo bovino podemos distinguir vacas de orixe norteafricana (haplogrupo T1a), sobre todo ó longo das costas occidentais de Europa, como poden ser a raza maronesa en Portugal, a raza cachena en Galicia, a raza jersey en Francia, a raza white en Inglaterra ou a raza highlands en Escocia. Eran vacas de menor porte e capa de cor rubia. Pola contra, as vacas da Centroeuropa eran portadoras do haplogrupo T3, eran vacas de maior tamaño e capa negra ou escura como por exemplo as frisonas alemás.

Os pobos do norte de África eran portadores dunha importante cultura. Atesouraban avanzados coñecementos cosmográficos procedentes da actual Mauritania. Sabían da existencia de terras máis aló do océano Atlántico, preto de Senegal, e seduciron á poboación local coa inmortalidade no máis alá. A construción de dolmens e megalitos simbolizan estes coñecementos cosmográficos e relixiosos. De feito, moitos dolmens chámanse na actualidade “casas de mouros”.
Os petróglifos en forma de labirinto tamén teñén unha orixe oriental-africana. Son coils e representan as cosmogonías primixenias a partir das cales se inicia o relato da creación, como un precedente da escritura. Os míticos druidas celtas son herdeiros de todo este saber esotérico.

En torno ó ano 2.000 a.C chegaron as linguas indoeuropeas a península ibérica procedentes de Europa. A existencia do substrato norteafricano axudou a diferenciar as linguas celtas occidentais. A súa sonoridade pervive na actualidade en linguas coma o portugués, o galego, o francés ou o inglés. O substrato norteafricano perdurou á chegada das linguas indoeuropeas dende Europa e configurou as linguas celtas occidentais. Sail é navegar en Reino Unido e silel é navegar en Marrocos.

Para os romanos os celtas habitaban o outro lado dos Alpes, en contraposición co mundo mediterráneo. Os celtas eran os pobos da Europa húmida, boscosa e atlántica. Hoxe en día sabemos que había celtas da cultura Hallstatt e La Tène, celtoescitas ou gálatas, claramente centroeuropeos, e por outra banda, estaban os celtas da marxe atlántica europea posuidores dun forte substrato africano que os diferenciaba dos celtas centroeuropeos. Os celtas atlánticos son os africanos do continente europeo e a súa influencia esténdese dende Portugal ata Escocia, ao longo da costa atlántica europea. Dende Senegal ata Escocia esténdese o mundo atlántico, o mundo celta.

Por Marcos Castro Vilas. Arquitecto, historiador e investigador.